
Por: Josselyn Enriquez
Chihuahua, Chih.- La Policía Cibernética atendió el día de ayer un nuevo caso de grooming, en el que resultó víctima una adolescente de 13 años, informó Alexis Molina, jefe de dicha unidad. El caso inició cuando la menor fue contactada por un perfil que simulaba ser una figura pública. El proceso de acercamiento se estima que pudo durar días o incluso semanas, con el objetivo de ganarse la confianza de la adolescente.
Una vez establecida la comunicación, el agresor solicitó contenido privado (fotografías, video y audios) y al negarse la joven a continuar enviando material, el delito evolucionó a extorsión, presionando a los familiares con la amenaza de publicar el contenido recibido si no se enviaba más.
Molina explicó que en los últimos tres casos de grooming atendidos por la unidad se ha logrado identificar la ubicación de los responsables, todo fuera del país: uno en España, otro en Honduras y el más reciente en Colombia.
Ante este tipo de delitos, el jefe de la Policía Cibernética recomendó a los padres mantener supervisión del uso de dispositivos tecnológicos por parte de los menores. “Todo depende del uso y la supervisión que que nosotros como padres demos a nuestros hijos. De ahí parte todo”, expresó. También llamó a dejar de lado la excusa de no entender la tecnología, y a involucrarse en el acompañamiento digital de los hijos.
La Policía Cibernética ofrece pláticas dirigidas a padres de familia, instituciones educativas y alumnos desde sexto de primaria hasta nivel universitario. En estas sesiones se abordan temas como el grooming, la detección de señales de alerta y el uso de controles parentales. Molina explicó que es posible conocer de forma sencilla la actividad digital de los menores, pero requiere una capacitación previa y el uso de herramientas especializadas.
Además, explicó que cuando se detectan casos de grooming, se canaliza a la Unidad Especializada en Delitos de Género y posteriormente a la Fiscalía Especializada de la Mujer (FEM), donde se brinda atención psicológica a la víctima y se formaliza la denuncia.
Finalmente, Molina dirigió un mensaje a niñas, niños y adolescentes: “Recordemos que es una cuestión de uso, si yo le saco beneficio para tener contacto con mi familia, nos puede ayudar demasiado, pero si no tengo esa supervisión, me puedo meter en unos problemas. En el caso de los jóvenes, les pedimos que lo usen de manera abierta, es decir, que sus papás conozcan su contraseña, sus actividades. Recuerden que ellos todavía están a la supervisión de sus padres, entonces es importante que toda la actividad que yo haga en internet mis padres estén enterados”.