En un estudio publicado en la revista Nature Geoscience, se reveló que un equipo de científicos chinos encontró nuevos restos de agua en cristales de impacto hallados en el suelo lunar por la misión Chang’e 5 de China. Los cristales de impacto podrían ser una nueva reserva de agua en la Luna y actúan como amortiguadores para el ciclo del agua de superficie lunar.
La presencia de agua en la superficie lunar ha despertado el interés de la comunidad científica y el descubrimiento de estos cristales podría tener implicaciones significativas para futuras misiones de exploración espacial. Los científicos creen que todavía hay reservas hídricas por identificar que tengan la capacidad de amortiguar el ciclo del agua de superficie lunar.
El descubrimiento de los cristales de impacto podría permitir a los astronautas utilizar el agua de la Luna como recurso para la vida y la investigación en futuras misiones. Además, un cálculo aproximado sugiere que podría haber alrededor de un tercio de un billón de toneladas de agua en el interior de todas las perlas de vidrio de la Luna.
Para liberar el agua de las perlas, basta con un calor suave de unos 100 grados centígrados. Este descubrimiento se realizó en cooperación con la Universidad de Nanjing, la Open University, el Museo de Historia Natural, la Universidad de Mánchester y la Universidad de Ciencia y Tecnología de China.
En general, este descubrimiento es un paso importante hacia la comprensión de la hidrología lunar y podría tener implicaciones significativas para la exploración espacial futura. Sin embargo, se necesitan más investigaciones para determinar la cantidad de agua presente y su accesibilidad para futuras misiones. Este descubrimiento demuestra la importancia del trabajo en equipo y la colaboración internacional en el avance de la investigación científica.