Las Fuerzas Armadas del Brasil divulgaron el domingo un comunicado en el que orientan a sus miembros desvincularse de los partidos políticos para hacer cumplir de manera efectiva la Constitución Federal, informaron fuentes castrenses.
La institución armada, compuesta por el Ejército, la Marina y la Fuerza Aérea, declaró que la orientación surgió como parte de una articulación del Ministerio de Defensa basada en la Propuesta de Enmienda a la Constitución (PEC) para prohibir el retorno al servicio activo de militares que se presenten a elecciones.
El texto reitera que se tiene como objetivo alertar y hacer cumplir la Constitución Federal. “Tal situación (de filiación partidista) contradice las normas vigentes y es susceptible de sanción disciplinaria”, indicó la Armada.
Esta arma adoptó la medida desde el 8 de marzo en el Boletín de Órdenes y Noticias, documento restringido de uso interno. En el documento se recalcó el compromiso con la independencia y exención de las elecciones personales de sus militares, siempre y cuando cumplan con las legislaciones vigentes.
Según el profesor Fabio Tavares Sobreira “Los militares deben ser neutrales e imparciales con respecto a las cuestiones políticas del país. Sin embargo, existe una laguna en la Constitución sobre la posibilidad de que los militares disputaran elecciones y retornaran a filas tras el fin del mandato”, argumentó.
Datos estadísticos revelaron que en las elecciones de 2022 se presentaron al menos 299 militares, entre activos y de la reserva para cargos de gobernador, senador, diputados federales y estaduales.
Entre de militares activos que asumieron funciones políticas en el gobierno del expresidente Jair Bolsonaro, aparecen los casos de Eduardo Pazuello (Ministerio de Salud), Luiz Eduardo Ramos (Secretaría de Gobierno), Walter Braga Netto (Casa Civil) y Flávio Rocha (Secretaría de Asuntos Estratégicos).
Pazuello fue investigado por el Ejército por su participación en un acto político en 2021. El exministro de Salud respondió por la sospecha de violar la norma que impide la participación de militares en eventos de carácter partidista sin autorización del Comando del Ejército. No obstante, fue absuelto.
Expertos consultados coinciden en que la propuesta puede garantizar imparcialidad y evitar politizar el ambiente militar. Al decir del profesor Tavares Sobreira “los militares que opten por seguir la carrera política podrán hacerlo sin perjudicar la imagen de las Fuerzas Armadas ni generar conflictos de interés”.