El Fiscal General de los Estados Unidos, Merrick Garland, informó que los líderes del Cártel de Sinaloa con sede en México fueron acusados de dirigir una operación de tráfico de fentanilo en colaboración con compañías químicas y farmacéuticas chinas.
Tres hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán fueron acusados en una de las respuestas más ambiciosas a la epidemia de drogas que ha causado la muerte de cientos de miles de estadounidenses en los últimos ocho años.
Más de dos docenas de acusados en México, China y Guatemala enfrentan acusaciones separadas, incluyendo Ovidio Guzmán López, uno de los hijos de El Chapo, quien fue arrestado en México y espera su extradición a los Estados Unidos. También se acusó a cuatro propietarios de empresas chinas que presuntamente proporcionaron precursores químicos al cártel.
El Departamento del Tesoro de los Estados Unidos impuso sanciones a las empresas chinas Wuhan Shuokang Biological Technology Co Ltd y Suzhou Xiaoli Pharmatech Co Ltd. Garland trabajará con las autoridades mexicanas para buscar la extradición de los acusados restantes y pidió a China que detenga el flujo de precursores químicos de fentanilo que salen del país.