
Por: Josselyn Enriquez
Chihuahua, Chih.- Ante el debate nacional sobre la reducción de la jornada laboral en México, y en el contexto de la presentación de una estrategia municipal para impulsar mejores culturas laborales en las empresas, el alcalde de Chihuahua, Marco Antonio Bonilla Mendoza se pronunció respecto al tema. Señaló la importancia de realizar un análisis profundo que contemple la productividad, los salarios y los impactos socioeconómicos que podría implicar esta reforma.
Si bien reconoció que la salud mental debe considerarse dentro del entorno laboral, también advirtió sobre la necesidad de hacer un estudio serio que permita ver posibles afectaciones al sector empresarial. En todo caso, el alcalde recalcó que debe garantizarse que las empresas cuenten con la capacidad de cubrir los salarios en caso de implementarse la jornada de 40 horas.

Bonilla subrayó que aunque el tema no está descartado, el análisis le corresponde al Gobierno Federal, por lo que el municipio no ha definido aún cuál sería la capacidad real de las empresas locales para sostener esta medida. Además, dijo que el municipio no puede tomar decisiones sobre recursos privados o ajenos como si fueran parte de su propia administración.
También advirtió que, en un país como México, donde muchas empresas extranjeras operan en grandes industrias, una reducción de la jornada laboral sin el debido análisis podría aumentar los costos de producción y provocar que algunas empresas decidan mudarse a otros países donde la productividad sea más rentable.
En ese sentido, en el municipio de Chihuahua no existen estudios sobre cómo impactaría esta reforma tanto en el tejido social como en los distintos sectores económicos: clase baja, media o alta.
Sin embargo, desde 2024 surgió la colectiva Yo Por Las 40 Horas Chihuahua, que impulsa la idea de que las personas deben tener derecho a más tiempo libre y menos tiempo dedicado exclusivamente al trabajo. Este colectivo busca promover la reducción de la jornada como una vía para mejorar la calidad de vida y fomentar un equilibrio entre lo personal y lo laboral.

El debate está abierto, pero mientras no haya estudios claros ni posturas definidas por parte del gobierno municipal, el futuro de la jornada de 40 horas en Chihuahua sigue en pausa.