Chihuahua, Chih.— Rodeada de paisajes imponentes, aire limpio y una rica herencia cultural, la Sierra Tarahumara se consolida como el destino ideal para quienes buscan vacacionar en contacto con la naturaleza este verano. Con sus bosques revitalizados por las lluvias recientes, temperaturas templadas y una oferta turística cada vez más robusta, esta joya del norte del país enorgullece a los chihuahuenses y enamora a quienes la visitan.
La región alberga tres de los Pueblos Mágicos del estado: Creel, Batopilas y Guachochi, cada uno con atractivos únicos que reflejan la diversidad natural, histórica y cultural de Chihuahua.
Tres Pueblos Mágicos, tres formas de descubrir la Sierra
Creel, con su icónica estación ferroviaria en la ruta del Chepe, no solo es puerta de entrada a paisajes como el Lago de Arareko y la Cascada de Cusárare, sino que ha sido reconocida por la Organización Mundial del Turismo como una de las Mejores Poblaciones Turísticas para Visitar en el Mundo, distinción que reafirma el valor de sus bellezas y hospitalidad.
Batopilas, enclavado en el fondo de una barranca a más de 1,800 metros de profundidad, ofrece un entorno tropical inusual para la región. Su arquitectura colonial y su historia minera, que se remonta al virreinato, hacen de este Pueblo Mágico una experiencia difícil de igualar.
Guachochi, por su parte, deslumbra con la Cascada El Salto en pleno corazón de la ciudad, ahora en su máximo esplendor gracias a las lluvias de verano. A pocos pasos se encuentran el Lago de las Garzas y el Lago de las Truchas, escenarios naturales ideales para quienes buscan descanso o actividades al aire libre.
Naturaleza viva y clima ideal tras las lluvias
Además de su belleza natural, la región cuenta con infraestructura hotelera adecuada para recibir tanto al turismo nacional como internacional, así como con opciones tradicionales como cabañas enclavadas en el bosque. La gastronomía también es motivo de orgullo regional: desde frutas tropicales preparadas al estilo Batopilas hasta truchas frescas cocinadas en Guachochi, cada platillo lleva el sello distintivo de la cocina chihuahuense.
Entre los atractivos más emblemáticos destacan la Cascada de Basaseachi, una de las más altas de México, y las Barrancas del Cobre, que superan en profundidad al Gran Cañón del Colorado. En esta zona se encuentra el Parque Barrancas, referente del turismo de aventura en el país.
Aunque actualmente el teleférico, uno de los más largos del mundo, se encuentra en remodelación, se espera que vuelva a operar en la primera semana de agosto. Su reapertura permitirá nuevamente disfrutar de experiencias como el Zip Rider, una tirolesa de alta velocidad que cruza la barranca en tan solo tres minutos, y el Circuito de las Siete Tirolesas, para quienes buscan emociones fuertes.
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La Sierra Tarahumara también se alista para recibir el Chihuahua By UTMB, en octubre, uno de los eventos de ultradistancia más importantes del mundo. En él, más de dos mil atletas recorrerán las montañas junto a corredores rarámuri en distancias de hasta 100 millas, consolidando a la región como un destino de clase mundial.
Visitar la Sierra Tarahumara este verano no solo es una escapada inolvidable: es también un motivo de orgullo para quienes llaman a Chihuahua su hogar.