La noche oscura y silenciosa de la carretera Villahermosa-Coatzacoalcos, fue interrumpido por los gritos desesperados de más de dos centenares de personas migrantes que viajaban en la caja seca de un tráiler abandonado en la carretera cerca de la localidad de Nuevo Teapa, Veracruz.
Había 209 personas migrantes procedentes de Guatemala, El Salvador, Ecuador y Honduras atrapadas en condiciones de hacinamiento en la parte trasera del vehículo.
Por suerte, la Guardia Nacional (GN) y el Instituto Nacional de Migración (INM) actuaron rápidamente. Con la ayuda de la GN, el INM pudo localizar el tráiler poco antes de la medianoche del miércoles 12 de abril. Los oficiales abrieron una de las puertas de la caja seca y se dieron cuenta de la magnitud de la tragedia.
Mientras las personas migrantes pedían ayuda, hombres, mujeres y menores de edad comenzaron a salir del vehículo.
La estructura de la caja seca había sido modificada para acomodar un segundo piso y transportar un mayor número de migrantes extranjeros. Sin embargo, esto resultó en condiciones extremadamente peligrosas para los pasajeros.
Uno de los migrantes incluso presentaba síntomas de asfixia y tuvo que ser trasladado de emergencia a un hospital cercano.
El INM identificó a 144 mujeres y hombres adultos de Guatemala, seis de Honduras, seis de El Salvador y cinco de Ecuador que se encontraban en México en situación irregular.
También se brindó apoyo a 23 personas migrantes más que viajaban en nueve núcleos familiares y a 25 menores de edad no acompañados originarios de Guatemala. Estos últimos quedarán bajo la tutela del Sistema para el Desarrollo Integral para la Familia de la entidad.
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