La tranquila mañana en el Pacífico Mexicano, al sureste del puerto de Acapulco, Guerrero, se vio alterada por una intensa operación llevada a cabo por la Secretaría de Marina y la Armada de México. En esta ocasión, la Guardia Costera tenía una misión clara: detener cualquier actividad ilícita en la zona.
Tras un despliegue estratégico de unidades aéreas y de superficie, el personal naval avistó una embarcación menor que levantó sospechas.
Con precisión y cautela, se acercaron a la embarcación y procedieron a realizar una inspección visual. Para sorpresa de todos, a bordo se encontraron 34 bultos de color negro que contenían cocaína, con un peso total de aproximadamente mil 164 kilogramos. Además, se descubrieron contenedores con alrededor de 400 litros de combustible.
La detención de cinco hombres que tripulaban la embarcación fue inmediata. El personal naval les informó sus derechos y los puso a disposición de las autoridades competentes, junto con la droga y el combustible asegurados.
OPERATIVOS EN LAS COSTAS
Este operativo se llevó a cabo en el marco del Mantenimiento del Estado de Derecho y con el objetivo de combatir el tráfico de mercancías ilícitas en la Zona Económica Exclusiva.
Es importante destacar que esta acción se realizó en estricto apego al Protocolo de Actuación del Personal Naval en funciones de Guardia Costera, publicado en el Diario Oficial de la Federación. Dicho protocolo establece la participación coordinada de la Armada de México con unidades aéreas, terrestres y de superficie, así como con las autoridades competentes, siempre respetando los Derechos Humanos y la Ley Nacional sobre el Uso de la Fuerza.
Estas operaciones forman parte de las actividades de vigilancia marítima, aérea y terrestre que la Secretaría de Marina realiza constantemente para combatir la delincuencia y garantizar el Estado de Derecho en las Zonas Marinas Mexicanas. Con cada acción, reafirman su compromiso con la seguridad y la protección de las aguas territoriales.