El viernes 27 de octubre, la vida de una familia se sumió en la angustia en Meoqui, Chihuahua, cuando se denunció la desaparición de una joven de 14 años. La Fiscalía Especializada en Atención a Mujeres Víctimas del Delito por Razones de Género y a la Familia (FEM) emprendió una búsqueda exhaustiva en colaboración con las fuerzas de seguridad, incluyendo la difusión de la desaparición en los medios y las redes sociales.
Las investigaciones pronto señalaron a un sospechoso inesperado: el padre biológico de la adolescente, Gerardo P. N. Los indicios sugerían que había secuestrado a su hija y la mantenía en contra de su voluntad.
Según los informes, el padre abordó a la menor de 14 años cerca de una escuela en Meoqui y la forzó a subir a un vehículo Chevrolet Silverado modelo 2000. Su objetivo aparente era cruzar la frontera a Ciudad Juárez y posteriormente a Estados Unidos.
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Durante este tiempo, se cree que mantuvo a la joven retenida e incomunicada. Sin embargo, sus planes se vieron frustrados, y se vio obligado a regresar a La Regina, en Julimes, donde finalmente fue detenido por la Policía Municipal en la noche del 28 de octubre.
El padre, Gerardo P. N., ha sido vinculado a proceso por el delito de privación ilegal de la libertad. El juez de control dictaminó que enfrentaría su situación legal bajo medidas cautelares distintas a la prisión preventiva.
Aunque las pruebas parecen sólidas, la Fiscalía recordó que, según las leyes vigentes, el imputado se presume inocente hasta que se demuestre su culpabilidad a través de una sentencia judicial.
