El pasado 6 de agosto, la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE) brindó atención a diez migrantes provenientes de África, quienes denunciaron haber sido víctimas de secuestro y tortura por parte de un grupo delictivo. El incidente se registró en la carretera Chihuahua-Villa Ahumada, donde los migrantes fueron encontrados en condiciones deplorables.
Los hechos comenzaron cuando una llamada al número de emergencia 9-1-1 alertó a las autoridades sobre la presencia de un grupo de personas deambulando erráticamente. Ante la situación, agentes de la Policía de Despliegue, elementos de Inteligencia Policial, del Centro de Mando C7-iA y personal de rescate se movilizaron rápidamente al lugar.
Al llegar, las autoridades constataron que cuatro de los migrantes eran originarios de Sudán y seis de Marruecos. Gracias a la intervención de un intérprete de inglés, los migrantes pudieron comunicar que habían sido secuestrados y torturados, además de ser utilizados como medio de extorsión hacia sus familias.
El personal de la Cruz Roja Mexicana realizó una revisión médica a los migrantes, encontrando indicadores de severa deshidratación, desnutrición y múltiples heridas. Ante estos hallazgos, se notificó de inmediato a la Agencia Estatal de Investigación (AEI) y al Instituto Nacional de Migración (INM) para iniciar una investigación exhaustiva y esclarecer los hechos.
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Los migrantes fueron trasladados a un albergue donde recibirán atención médica especializada y apoyo psicológico. Además, se les proporcionará asistencia legal para resolver su situación migratoria.
Las autoridades han iniciado las investigaciones correspondientes para identificar y capturar a los responsables de este delito, y han reforzado las medidas de seguridad en la región para prevenir futuros incidentes de esta naturaleza.