Chihuahua, Chih.— La diputada Brenda Ríos denunció públicamente que su familia ha sido objeto de acoso e intimidación, señalando a personas presuntamente bajo órdenes del presidente municipal Marco Bonilla como responsables de estos actos. La legisladora expresó su mayor preocupación al asegurar que sus hijos, menores de edad, han sido seguidos y fotografiados durante su vida cotidiana, especialmente cuando regresan de la escuela.
Ríos calificó esta situación como un ataque personal que trasciende las diferencias políticas y que afecta directamente la seguridad de su familia. “El hecho de que mis hijos sean perseguidos y fotografiados es algo que ninguna madre debería soportar. Es una agresión directa a mi familia, y temo por su seguridad”, afirmó.
Además, señaló que sus hijos, ajenos a cualquier disputa política, están siendo usados como herramientas de presión para intentar silenciarla.
La diputada hizo un llamado a las autoridades para que tomen medidas y eviten que se normalicen estas acciones que ponen en riesgo la integridad física y emocional de los menores. “No es justo que mis hijos paguen el precio por denunciar”, expresó Ríos, aludiendo a las acusaciones de corrupción que ha realizado en contra del alcalde Marco Bonilla.
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En sus declaraciones, Ríos responsabilizó directamente al presidente municipal de cualquier daño que su familia pueda sufrir como resultado de estas acciones, y exigió que se ponga fin a las presuntas intimidaciones. A pesar de la gravedad de la situación, la diputada aseguró que no permitirá que estos actos la disuadan de continuar con su labor legislativa y su compromiso con la verdad y la transparencia.