Por: Alan Martínez
Chihuahua, Chih.- Desde el pasado 15 de agosto, la capital del estado cuenta con la primera ruta turística tipo Hop on Hop off, denominada “Que bonito es Chihuahua”, que permite a los visitantes subir y bajar cuantas veces deseen, con un costo de 300 pesos para adultos y 200 pesos para infantes e INAPAM. Sin embargo, una de las calles incluidas en el recorrido, Paseos Vistas del Sol, presenta un estado de deterioro que podría afectar la percepción de los turistas y visitantes.
El recorrido inicia en el Hotel Vetta, continúa por Paseo Central, la torre Azenzo, donde se encuentra la calle señalada, y sigue por Fashion Mall, centro histórico, Palacio de Gobierno, Paseo Cultural Bolívar y Museo de la Revolución, antes de regresar al punto de inicio.
Paseos Vistas del Sol, ubicada entre el Periférico de la Juventud y avenida Tomás Valles Vivar, concentra bares, restaurantes, hoteles y negocios de alto nivel que se ven impactados por grietas, baches y hundimientos. Locatarios han señalado que la apariencia actual de la calle perjudica la imagen de sus negocios frente a turistas y clientes locales.
El mal estado de la vía no es nuevo ya que desde hace siete años, los comerciantes han solicitado mantenimiento y recarpeteo al Gobierno Municipal, que ha justificado la omisión por “falta de recurso”.
A pesar de que en 2018 se pavimentaron calles aledañas, la vía principal quedó sin atención y, según los locatarios, la respuesta oficial se limitó a señalar que el presupuesto estaba destinado a otras prioridades.
Con la puesta en marcha del Turibus, que conecta zonas de alta plusvalía y relevancia comercial, la necesidad de mejorar la infraestructura vial se vuelve más evidente. Para los comerciantes, la calle no solo es una vía de tránsito, sino un escaparate frente a visitantes, por lo que consideran urgente la reparación.
“Dieron prioridad a otros proyectos, pero la apariencia de esta calle impacta directamente a los negocios y al turismo que queremos atraer”, comentó un locatario.
Mientras tanto, los visitantes del Turibus tendrán que convivir con un trayecto que, pese a ofrecer vistas y paradas icónicas, evidencia un descuido del Gobierno Municipal en la infraestructura urbana.