Por: Alan Martínez
Chihuahua, Chih.- La oficina estatal de la Comisión Nacional del Agua (Conagua) llamó este jueves a mantener la calma frente a la discusión de la reforma a la Ley de Aguas, luego de que en el sector agrícola surgieran temores sobre posibles afectaciones.
Su titular en Chihuahua, Román Alcántar Alvídrez, aseguró que el dictamen ya fue corregido a partir de las observaciones enviadas por productores y organizaciones rurales durante las últimas semanas.
El funcionario explicó que, durante el proceso legislativo en la Cámara de Diputados, el documento atravesó una revisión amplia que derivó en 50 modificaciones y 18 reservas, con la intención de resolver dudas generadas por la redacción original.
Recordó que la iniciativa impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum no llegó intacta a la votación, sino que se ajustó tras escuchar a los actores del campo.
Alcántar destacó que la reforma incorpora medidas para garantizar la disponibilidad de agua a largo plazo, reconoce los sistemas comunitarios indígenas y proporciona mayor certeza jurídica a quienes producen en el campo.
Reiteró que el objetivo es “poder garantizar el uso del agua en esta generación, en las siguientes, dotar de seguridad jurídica a las y los productores, diciéndoles que no cualquiera va a poder llegar y plantar un pozo”.
Uno de los puntos que subrayó fue el fortalecimiento de sanciones. Afirmó que las penalidades están dirigidas a quienes acaparan o lucran con concesiones, y no al sector agropecuario, el cual —dijo— quedó expresamente fuera de esas medidas. Como ejemplo, mencionó casos de aprovechamiento irregular asociados a empresas privadas, incluso vinculadas al exgobernador César Duarte, para ilustrar a quiénes están dirigidas esas disposiciones.
En medio de las protestas registradas en distintos estados, Alcántar insistió en que no existe motivo para bloqueos ni movilizaciones, pues las inquietudes del campo fueron incorporadas al texto final. Señaló además que el senador Ricardo Monreal participó en la aclaración de puntos que habían generado confusión y que motivaron parte de la inconformidad.
El delegado retomó también declaraciones del director general de Conagua, Efraín Morales, quien desmintió versiones que circularon en los últimos días, entre ellas la presunta prohibición de heredar derechos de agua o la restricción para adquirir terrenos con pozos. Afirmó que ninguna de esas advertencias forma parte de la reforma.
Finalmente, Alcántar aseguró que la intención de las modificaciones no es sancionar ni perjudicar a quienes trabajan la tierra, sino evitar abusos en el manejo del recurso. Reiteró que las adecuaciones responden a las propuestas del sector rural recogidas durante el proceso de análisis legislativo.