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Chihuahua, Chih.- Con el nombramiento de Jorge Salomón, gobernador de Puebla, como próximo titular del Instituto Nacional de Migración (INM), los empresarios de Chihuahua expresaron su preocupación por el rumbo de la política migratoria en México.
Salvador Carrejo Orozco, presidente de Coparmex Chihuahua, y Federico Baeza Mares, líder del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), hicieron un llamado al Gobierno Federal para implementar un cambio radical en esta área clave.
Ambos líderes señalaron que la gestión de Francisco Garduño, anterior titular del INM, fue “altamente deficiente” y dejaron claro que mantener las mismas estrategias podría derivar en problemas graves, especialmente en un contexto donde la relación con Estados Unidos se torna más tensa debido a la reciente victoria de Donald Trump en las elecciones presidenciales.
Baeza Mares recordó que el flujo migratorio generó conflictos económicos, como los cierres de puentes fronterizos en Texas, que afectaron severamente a la economía del estado grande. También señaló los problemas sociales asociados, como la desnutrición, las deficiencias en servicios de salud, y los fallecimientos de migrantes sin identificar.
“Necesitamos demostrarle a Estados Unidos que estamos controlando el flujo migratorio en las fronteras del sur. El nuevo titular debe comprometerse a mejorar los controles y generar estadísticas confiables sobre la situación migratoria,” subrayó Baeza.
Carrejo Orozco enfatizó que, con la llegada de Trump a la presidencia de Estados Unidos, México enfrentará “grandes presiones” en materia migratoria, especialmente en sus relaciones comerciales. Asimismo, criticó el desempeño de Garduño, señalando que, pese a los esfuerzos proactivos de los empresarios para colaborar con el INM, nunca obtuvieron respuestas satisfactorias.
“Nuestros planteamientos siempre fueron con el ánimo de ayudar a resolver los problemas, pero el INM no estuvo a la altura de las circunstancias”, declaró Carrejo.
Ambos dirigentes coincidieron en que la prioridad debe ser fortalecer los controles migratorios en las fronteras y trabajar en estrategias que beneficien tanto a los migrantes como a las comunidades afectadas por este fenómeno.
“El Gobierno Federal necesita reaccionar y demostrar compromiso real en la política migratoria, sobre todo en un momento tan crítico como el actual,” concluyó Carrejo.