El equipo multidisciplinario de la Comisión Local de Búsqueda (CLB) de la Fiscalía de Derechos Humanos y Desaparición Forzada, participó en una capacitación impartida por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) sobre la utilización de las tecnologías disponibles en los procesos de búsqueda de personas desaparecidas.
Esta capacitación fue impartida por el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), y se centró en la incorporación de equipos tecnológicos para recabar y analizar datos de manera remota.
Los expertos destacaron la importancia de estandarizar el uso de herramientas forenses como el GPR, GPSD, Resistividad y Georradar para recopilar datos digitales aéreos y terrestres que puedan ser utilizados como pruebas con valor jurídico en los procesos penales que involucran casos de desaparición forzada por particulares.
La instrucción se llevó a cabo en las instalaciones del C4 en la ciudad de Chihuahua y consistió en un módulo teórico y prácticas de campo para la detección de fosas clandestinas y recuperación de restos humanos.
EXPERTOS DE TALLA MUNDIAL
El Equipo Argentino de Antropología Forense es una organización sin fines de lucro fundada en Argentina en 1984. Se dedican a la investigación, el asesoramiento y la capacitación en antropología forense y derechos humanos, con el objetivo de ayudar en la identificación de víctimas de violaciones a los derechos humanos y crímenes de lesa humanidad.
El EAAF ha sido reconocido a nivel internacional por su labor en la identificación de personas desaparecidas en diversos países, especialmente en América Latina. Han trabajado en casos de desaparición forzada, violencia de género, genocidios, conflictos armados y catástrofes naturales.
En México, han colaborado desde 2001, y su trabajo ha sido fundamental en la investigación de casos de violaciones a los derechos humanos, como las desapariciones forzadas.
El EAAF ha participado en casos emblemáticos como en la investigación de la matanza de migrantes en San Fernando, Tamaulipas en 2010; el incendio en la Guardería ABC en Hermosillo, Sonora en 2009; y en la búsqueda de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa en 2014. También han trabajado en la identificación de restos de personas que han sido encontradas en fosas clandestinas en diferentes partes del país.
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